Si cuentas con una vivienda en una zona costera, serás consciente de que el aire que la rodea contiene altos niveles de sal. Es posible que tengas dudas de si un entorno con alto contenido en sal podría ser desfavorable o incluso dañar tu sistema solar fotovoltaico.
A la hora de barajar las distintas opciones que ofrece el marcado de panales solares actualmente, es importante tener en cuenta la resistencia a la degradación por salinidad de las placas solares si vives en una zona en la que factores ambientales como el aire y el agua salada, jueguen un papel importante en la degradación del panel.
Vayamos al grano. ¿Puede el aire y el agua salada dañar o afectar en general a los paneles solares, aparatos electrónicos y partes metálicas de tu instalación fotovoltaica?
Los paneles solares y la sal.
Vivir en un entorno con mucha sal significa que tu instalación solar tendrá que funcionar en condiciones ligeramente diferentes a las de un sistema de energía solar convencional. Los dos efectos de un entorno salino que debes tener en cuenta son la corrosión y la pérdida de eficiencia.
La corrosión, un factor a tener en cuenta.
Como ya sabrás, muchos metales se oxidan con el paso del tiempo únicamente por el mero hecho de estar cerca del agua o al aire libre, pero si además, la presencia de sal puede acelerar el proceso de corrosión.
La sal reacciona con el agua para formar una solución ligeramente ácida, que puede causar corrosión u oxidación a un ritmo más rápido que el agua sola.
Simplificando si cuentas con una vivienda cerca del mar, tus equipos electrónicos y metálicos de exterior pueden correr el riesgo de sufrir una corrosión acelerada. Centrándonos en los paneles solares, esto podría significar un riesgo las estructuras de montaje, el cableado, o incluso la oxidación de las propias células solares.
Afortunadamente en la mayoría de los casos podemos estar tranquilos, los paneles solares cuentan con una gran resistencia a la corrosión. Ya que, los propios módulos solares están sellados al vacío entre su lámina posterior e interior, evitando la corrosión interior a causa de la sal. Por lo que, a menos que nuestro panel cuente con una grieta, no debes de preocuparte porque tus paneles solares se corroan por un agente externo.
Por otro lado, los principales fabricantes de paneles solares de calidad realizan una serie de mediciones en sus paneles solares , para así, asegurarse de que pasan la conocida como prueba de corrosión por niebla salina IEC 61701. Aquellos paneles que han recibido esta certificación se han visto sometidos a rigurosas pruebas que simulan los efectos del duro clima costero.
Para más seguridad, cabe destacar que los materiales de fabricación de los paneles solares están especialmente diseñados para ser altamente resistentes a la corrosión, incluido su uso en entornos salinos. Las estructuras recomendadas concretamente para instalaciones cercanas al mar son aquellas fabricadas en aluminio anodizado, un metal muy resistente a la corrosión en condiciones de salinidad.
Si tienes alguna inquietud o preocupación sobre los materiales empleados en tu instalación solar, siempre es recomendable informarte sobre el producto previamente o preguntar a tu instalador qué productos o materiales está utilizando, para así, estar seguro de que tu instalación es resistente a la salinidad.
Pérdida de productividad.
Otro factor a tener en cuenta es como la sal puede ser la causa de la reducción de la producción de los paneles solares, sin que se pueda apreciar un daño visible de las partes metálicas de tu sistema fotovoltaico. Con el paso del tiempo, la sal puede depositarse sobre tus paneles, obstruyendo las células del panel y por consiguiente reduciendo su eficiencia.
Para hacer frente a cualquier pérdida potencial de producción de energía ligada a los depósitos de sal, puedes limpiar tus paneles solares de manera recurrente. La lluvia también será un aliado natural que te ayudará a mantener tus paneles limpios.
Revisa siempre la garantía que ofrece el fabricante de tu panel.
Como hemos mencionado anteriormente, si nuestro panel está producido por fabricantes de calidad contarán con toda probabilidad con la certificación IEC 61701, que indica que pueden hacer frente a los efectos de la salinidad. Aunque tus paneles solares ofrezcan esta certificación, es siempre recomendable comprobar la garantía.
Ciertos fabricantes de paneles solares (especialmente los que no tienen la certificación IEC 61701) no ofrecen el mismo grado de protección para los módulos solares instalados en la costa, siendo estos módulos por regla general mas económicos y de una calidad inferior, conllevando un riesgo añadido de corrosión y pérdida de eficiencia.
Previamente, antes de abordar la compra de tu sistema de paneles solares, te aconsejamos echar un vistazo al acuerdo de garantía del fabricante del panel en el cual estas interesado, para así, asegurarte de que sigue estando cubierto.
Tu instalador solar o distribuidor de material eléctrico debería poder recomendarte paneles y estructuras con certificación IEC 61701, así como, la correspondiente cobertura de garantía completa, independientemente de la proximidad de tu vivienda o negocio al mar.
Nuestras recomendaciones.
Desde Diego Díaz López contamos con una amplia experiencia a la hora de ofertar paneles y estructuras tanto a instaladores certificados como a particulares.
Por ello, nuestra recomendación a la hora de abordar una instalación cercana a un entorno marino, por su polivalencia para instalaciones tanto verticales como horizontales, es:
Para finalizar, la parte más importante, el panel solar, desde la empresa recomendamos encarecidamente los paneles solares de la marca REC, fabricante de gran renombre por la calidad y tecnología aplicada en sus paneles.
Como podemos observar, este panel cumple con la certificación IEC 61701, indispensable a la hora de instalar nuestros paneles en áreas cercanas a la costa.
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